Licda. Cristina Franco

Licda. Cristina Franco

Entrevista con Licda. Cristina Franco
Directora de Proyecto “Con Derecho a Elegir”
República Dominicana

Cristina Francisco desde la edad de nueve años empezó a visualizar que había claras diferencias hacia las personas con discapacidad en la sociedad. El ingresar al deporte le permitió conocer las realidades en otros países, acerca del sector de discapacidad y así nace su interés de asociarse, para crear políticas y leyes encaminadas a mejorar el nivel de vida del sector. Fue miembro fundador de la Asociación de Personas con Discapacidad Física Motora ASODIFIMO), luego fundó el Círculo de Mujeres con Discapacidad (CIMUDIS). Formó parte de una Comisión para Promover la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad y comenta su experiencia en la Fundación Internacional para Sistemas Electorales (IFES), en el proyecto “Con Derecho a Elegir”, que con el auspicio de la Agencia Internacional de Desarrollo de los Estados Unidos (USAID) se lleva a cabo en República Dominicana, colaboración de La Red Iberoamericana de Entidades de Personas con Discapacidad Física.

-¿Qué más realizó en el tema de discapacidad?
Me mantuve siempre involucrada promoviendo los derechos de las personas con discapacidad. Dentro de ese proceso, trabajé con varias entidades que tenían que ver al nivel de la región con lo que era investigaciones, para trabajar lo que hoy son los Derechos de las Personas con discapacidad en Naciones Unidas. Éramos comisión para promover la convención. Durante ese proceso fui aprendiendo mucho sobre las necesidades, y conocí que no sólo en el país había esas condiciones, sino que eran generalizadas en toda la región.

– Específicamente, ¿Cuándo entra al CONADIS?
En el CONADIS entro como integrante del CIMUDIS, era la Representante de mi Entidad y por ello me integro a trabajar en el CONADIS. Pero, ya de manera operativa, ingreso al CONADIS hace como apenas tres años. Me involucro para coordinar un tema entre lo que era el Consejo, el Ministerio de Trabajo y las Asociaciones, para promover la participación laboral de personas con discapacidad.

– ¿Aún colabora en el Consejo?
Ahora trabajo para el IFES, a partir de enero de este año. Estando en el CONADIS recibo la invitación para formar parte de un proyecto en el que se venía a trabajar en la participación política de las personas con discapacidad. Fíjate que habíamos venido trabajando desde la perspectiva de derechos, enfoque de género, derecho laboral.
Pero, específicamente el derecho a la participación política no la habíamos trabajado en dominicana. Como en muchos países de la región, todavía el sector de la discapacidad está muy poco empoderado, sobre la necesidad de integrarse dentro de lo que es el aspecto político, porque es ahí donde se hacen las leyes, donde se decide. Mientras estamos abajo, nosotros proclamamos, nos manifestamos nos promovemos, pero ahí no surgen los cambios, es allá arriba donde se toman las decisiones de lo que es importante y lo que no es.

¿Nos puede comentar acerca de los logros?, que han sido muchos, incluso en los medios virtuales se ha hablado muchísimo de este proyecto…
Decir primero que el sector con discapacidad en Latinoamérica está muy fragmentado, no sólo diría el sector discapacidad, sino el sector político. Tú ves las fragmentaciones, las divisiones, cualquiera que fuera el sector, porque no vamos a decir que las personas con discapacidad son los que estamos fuera de contexto.
Pero, lo cierto es que dentro de los grupos de personas con discapacidad tenemos personas con discapacidad física, visual, motora, auditiva y cada uno tiene sus necesidades y tiene sus perspectivas de qué manera deben de resolverlas. Esto se impregna al interior de las asociaciones y crea divisiones y dominicana no es la excepción.

-Hay que intentarlo
Sí, hay que intentarlo y yo siempre le apuesto a eso. Había muchas actividades importantes. Primero, la firma de 18 instituciones del sector de la discapacidad con la junta central electoral, con EIFES y con el CONADIS. Entre ellas entidades de servicios. Todos estaban representados en una mesa para firmar un acuerdo de apoyo, un logro que hay que seguir trabajando, que hay que seguir fortaleciendo, porque es una especie de plataforma que nos puede servir para hacer acciones conjunto.

– ¿Cuáles diría que son las lecciones aprendidas?
Pienso que se ha ganado, que hubo una mayor participación de las personas con discapacidad; el hecho de ganarnos su confianza. Desde el principio decíamos que no íbamos a poder eliminar todas las barreras, porque los centros electorales están en escuelas públicas y demás, pero sí garantizamos con la Junta Central Electoral al menos un apoyo: que los encargados de mesa, los facilitadores, apoyaran a las personas con discapacidad a minimizar las barreras. Creemos que eso cambió la mentalidad de muchas personas que no querían ir a votar. Nosotros pudimos percibir el cambio, porque además las personas se querían involucrar en el proceso.
Además, hicimos un buen trabajo con la Junta Central Electoral y a partir de ahí involucramos a personas con discapacidad en los procesos de verificación. Logramos que estos puntos fueran en espacios accesibles para personas con discapacidad y que ellos mismos dieran la información. Aproximadamente, más de 300 personas se involucraron en el proceso, en diferentes partes del país.
Logramos que la misma junta hiciera la plantilla para personas ciegas, que no era del todo útil según decía la población y no tuvo difusión. Yo considero todo eso ganancia, que no se tenían previstas y que no estaban establecidas y que involucran de alguna manera u otra la orientación, la difusión y la visibilización de personas con discapacidad. Todo eso es ganancia para el sector, para cambiar su imagen. Esto no es más que una plataforma de experiencias, para que en cuatro años estas realidades hayan cambiado.

– Algún mensaje que quiera decir a los amigos/as de Iberoamérica:
Mira, la participación política es sumamente interesante. Yo pienso que cada una de las entidades de personas con discapacidad, cada persona con discapacidad -de manera individual- tiene que luchar por empoderase por alcanzar lo que sería ese liderazgo a nivel de sus instituciones y de la comunidad, porque hay que tratar de incidir en el lugar donde se toman las decisiones.