Por segunda ocasión en su historia la tarima de la feria modista de Guadalajara brilló ante la presencia de personas con discapacidad que, sin miedo alguno, presumieron del diseño mexicano.

 

 

La fortaleza del espíritu es inquebrantable y la pasarela incluyente de Intermoda lo demostró. Siendo de los desfiles más abarrotados desde la gradas, por segunda ocasión en su historia la tarima de la feria modista de Guadalajara brilló ante la presencia de personas con discapacidad que, sin miedo alguno, presumieron del diseño mexicano.

La pasarela que contó con aditamentos especiales y de ubicación en sus costados para facilitar el avance de sus peculiares modelos, fue coordinada por Annett Castro, responsable de abrir la convocatoria a distintos diseñadores e instituciones de moda para que se sumarán al encuentro que abrió camino a una treintena de modelos con discapacidad visual, auditiva, intelectual, motriz y gente pequeña.
Creativos y firmas como Carlos Sotomayor, Ángel Grave, Oscar Figueroa, Aline Moreno, Karen Ruz, Boat Shoe, Saraíh Rodríguez, Héctor Serna, Diana Altamirano Munk, Bernardo Ibarra y Alejandra Aceves fueron algunos de los diseñadores que idearon siluetas y accesorios adaptados a las necesidades de cada uno de los modelos que portaron desde estilos muy casuales con mocasines hasta vestidos de gala con pedrería y joyería incluida.